Parece algo muy evidente, pero no es fácil llevarlo a la práctica.
Y sin embargo, nos puede aliviar en muchísimas situaciones en las que nos encontramos atascados, buscando soluciones mientras que a la vez, somos presa de nuestras emociones.
Tal vez entonces, nos sea de utilidad preguntarnos:
– ¿Por qué es esto un problema?
Por ejemplo, cuando estábamos confinados, mi hijo tenía que conectarse a sus clases por videoconferencia. No le gustaban nada. Se desconectaba, pintaba la silueta de la profesora con Paint sobre la pantalla, escribía por el chat de la aplicación a sus amigos, o se escondía por la casa.
Yo estaba cada día más nerviosa, y me enfadaba con él. Lógico, porque estaba pensando que mi hijo debería estar portándose mejor y atendiendo a su profesora.
Hasta que me planteé por qué motivo era todo esto un problema para mí.
La respuesta que me di, es que un niño de 6 años hace estas cosas, y es normal. Incluso puedo pensar que es sano que un niño sea curioso y toque todas las opciones de la pantalla, y tenga ganas de jugar con sus amigos, de esconderse, y de salir de casa.
Yo era la que estaba creando el problema, pensando que mi hijo se iba a convertir en un gamberro, y que la profesora lo iba a estigmatizar.
#problema #ansiedad #GAD #extrasistoles #coaching #byronkatie #saludmental #bienestar #confinamiento #hijos #emociones #covid #pensamientos #reflexiones
