Tenemos pensamientos que nos hemos creído tantas veces, que nos parecen hechos probados. Cuando queremos deshacernos de una creencia, tenemos que visualizarnos como esa persona que ya no se cree ese pensamiento. Y por supuesto, esa antigua creencia volverá a darnos unos toquecitos en el hombro de vez en cuando. Podemos decirle: -te veo, peroSigue leyendo «CRÉETELO HASTA EL FIN»