Algunas mañanas, cuando estamos todavía entre la sábanas, incluso antes de haber abierto los ojos, sentimos a nuestra querida amiga, la ansiedad. Tal vez nos hayamos dicho: Pero, ¿cómo es esto posible, si todavía no he tenido ningún pensamiento? ¡No me ha dado tiempo! Sabemos que nuestros pensamientos causan nuestras emociones. Y con la ansiedad,Sigue leyendo «UNA BOLSA FEA QUE ME ACOMPAÑA HOY»